En ocasiones los clientes invierten mucho dinero en una buena gafa, en una montura que les gusta y en unos cristales adecuados a las diversas afecciones que tengan. También en extras que ahora se consideran de primera necesidad en el escenario actual en el que estamos viviendo, donde la exposición a las pantallas es cada vez mayor. Antirreflejante, filtro contra la luz azul, reducción de cristales…

Todo el mundo ve normal y necesario acudir a su óptica de confianza e invertir en este tipo de aspectos a la hora de comprarse unas gafas. Lo mismo ocurre con las lentes de contacto. Es importante que sean cómodas y que se adapten perfectamente a nuestras necesidades visuales, aunque esto implique pagar más. Pero, ¿y después? Seguramente su óptico optometrista le haya dado todas las indicaciones para el cuidado y la limpieza de las gafas y lentes de contacto, pero en muchas ocasiones son aspectos que se descuidan y que pueden determinar la vida útil de dichos productos.

Desde CECOP queremos recordar de un vistazo y de una manera sencilla cuáles son los tips básicos que deberíamos seguir si queremos mantener en perfecto estado tanto nuestras gafas de ver o de sol como las lentes de contacto.

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